La diabetes descontrolada puede causar problemas en los pies. Los altos niveles de glucosa ocasiona daño en las vías nerviosas y en la circulación, lo que reduce la sensibilidad de la piel. A causa de esto se presentan diversas manifestaciones de irregularidades, entre ellas, la presencia de hongos en los pies. La presencia de hongos puede producir mal olor o humedad excesiva. Uno de los síntomas principales es la comezón intensa, la cual puede llevar al rascado excesivo, con el consiguiente daño a la piel y esto puede constituir la vía de entrada para una infección bacteriana.
La infección bacteriana puede producir mayor inflamación, volverse una herida más amplia e incluso penetrar en los tejidos más profundos produciendo una úlcera, lo cual dificulta el tratamiento y la curación.
También puede haber infección por hongos en las uñas. Se presenta como una coloración anormal amarilla o negra de la uña, estar porosa o presentar alguna deformidad.
El podólogo es el profesional encargado del cuidado de los pies, mantener una constante supervisión por parte de estos especialistas permite la detección temprana de lesiones lo que favorece una intervención oportuna que permite limitar el daño y evitar su progresión a problemas mayores.
Recuerde que en la mayoría de las amputaciones o lesiones graves el problema inicia con una lesión menor que no se atendió a tiempo y adecuadamente. La historia pudiera haber sido diferente si se hubieran tenido los cuidados y precausiones adecuadas